Hace dos años creía tenerlo todo resuelto como desarrollador frontend: aplicaciones React rápidas, puntuaciones Lighthouse 95+, diseños responsivos pixel perfect y TypeScript limpio. Esa era mi definición de gran frontend.
La verdad que aprendí a las malas: el código que funciona perfectamente puede seguir sintiéndose roto para los usuarios.
Mientras trabajaba en proyectos empresariales noté algo extraño: cumplíamos objetivos técnicos como APIs rápidas, paquetes optimizados y buenas métricas, pero los usuarios seguían atascándose. Algunos no sabían si su acción había tenido éxito, otros pulsaban botones con rabia porque no había retroalimentación. Fue entonces cuando entendí que ser un gran desarrollador frontend no es solo escribir código sino diseñar experiencias. Esa lección se profundizó al realizar el curso Principles of UX UI Design de Meta.
Principios de UX que cambiaron cómo programo: primero, el marco POUR de WCAG 2.1 dejó de ser una lista de verificación y pasó a ser la base del buen UX. Perceivable: textos alternativos, contraste y subtítulos; Operable: soporte completo por teclado y sin trampas; Understandable: etiquetas claras y mensajes de error útiles; Robust: HTML semántico que funciona con lectores de pantalla. Por ejemplo, migré un tablero drag and drop que solo funcionaba con ratón para añadir navegación por teclado y no solo lo hice accesible sino también más rápido para usuarios avanzados.
Segundo, las heurísticas de Jakob Nielsen se convirtieron en mi checklist para componentes React: visibilidad del estado mostrando siempre progreso o cargas, prevención de errores confirmando acciones destructivas, consistencia manteniendo patrones iguales en toda la app y control del usuario ofreciendo deshacer o cancelar. En vez de mostrar un mensaje vago como Error occurred ahora doy retroalimentación accionable con opciones para reintentar o guardar borrador, lo que reduce fricción y llamadas al soporte.
Tercero, la Ley de Fitts: objetivos grandes equivalen a interacciones más rápidas. En móvil los botones deben medir al menos 44px por 44px. En pruebas internas las tareas se completaron un 40% más rápido solo porque los botones eran más fáciles de tocar.
Cuarto, la regla de Miller: la memoria a corto plazo gestiona alrededor de 7 elementos. Aplicado a aplicaciones React: dividir formularios largos en pasos, mantener listas desplegables en 7 9 opciones y usar revelado progresivo para opciones avanzadas. Tras aplicar esto los abandonos en formularios complejos disminuyeron notablemente.
Cómo el UX mejoró mi código: antes me centraba en hacer que las funcionalidades funcionaran; ahora me enfoco en que se sientan bien. Resultado: HTML semántico mejor para lectores de pantalla y SEO, estados de error claros que reducen tickets de soporte, indicadores de carga que evitan el rage clicking y objetivos táctiles más grandes que aceleran la interacción. En resumen, ingeniería con empatía.
Impacto real al combinar optimización técnica con UX: tiempos de carga hasta 80% más rápidos, 45% más conversiones, cumplimiento WCAG 2.1 AA y aplicaciones que la gente disfruta usar. Es prueba de que los principios de UX hacen el código React más fuerte y no más pesado.
Mi camino de aprendizaje continúa: estoy finalizando el Front End Developer Certificate de Meta y el módulo de UX UI ha sido un punto de inflexión. En mi hoja de ruta están Java y estructuras de datos para backend y diseño de sistemas, IBM Full Stack JavaScript, AWS Cloud Practitioner y el Google UX Design Certificate. Hoy ser frontend no es suficiente; hay que ser full stack y centrado en el usuario.
Pequeños wins de UX para desarrolladores: añadir estados visibles de carga en cada acción asíncrona; hacer mensajes de error accionables como reintentar o guardar como borrador; y usar HTML semántico primero y ARIA en segundo lugar. Cambios pequeños, gran diferencia.
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Reflexión final: antes del UX construía funcionalidades que funcionaban; después del UX construyo experiencias que la gente ama usar. Eso es realmente ser desarrollador frontend.
Y ahora te pregunto: cuál es ese principio de UX que hubieras querido aprender antes en tu trayectoria como desarrollador