Hoy en día casi todos coincidimos en que es buena idea que las personas de diseño entiendan lo básico del desarrollo front-end, y que quienes programan conozcan principios clave de experiencia de usuario como el uso intencional de márgenes, jerarquía visual y accesibilidad. Al final, comprender el trabajo del otro hace que la colaboración sea más fluida y eficaz. Aun así, aprender una disciplina nueva requiere tiempo y esfuerzo, y saber que debes hacerlo rara vez es el mejor motivador.
En mi primer rol de UX trabajé en una corporación grande donde la mayor parte del desarrollo estaba externalizado. Mientras el capítulo de diseño se coordinaba bien con rituales semanales y espacios de intercambio, la conversión de nuestros archivos de Figma en un sitio dinámico era una caja negra. Hacíamos handoffs en inglés como lengua franca, aunque nadie era nativo, y hasta dentro del equipo en alemán debatíamos cómo nombrar ciertos componentes. Lo único que yo quería era poder explicar con precisión lo que necesitaba.
Una de mis primeras tareas fue auditar varias webs existentes. Empecé recorriendo las páginas, anotando inconsistencias y términos que no comprendía. Recordé algo esencial que aprendí en mi formación de UX: si no es accesible, no es usable. Así que también debía evaluar accesibilidad. En el portátil de trabajo no podía usar extensiones, pero en mi equipo personal pasé WAVE y aparecieron muchos avisos. Entendí rápido los alt text ausentes, pero me perdía con cosas como aria label o el atributo aria hidden con valores true y false. Qué significaba ese false, qué estaba realmente oculto o expuesto a las tecnologías de asistencia.
Investigando descubrí que ARIA significa Accessible Rich Internet Applications y que aria hidden true oculta un elemento a lectores de pantalla, mientras que false lo expone. Eso me ayudó a detectar que en un carrusel había usos aleatorios de aria hidden true que impedían que elementos relevantes fueran anunciados. El punto de inflexión fue un ítem en un menú flyout que no se podía alcanzar con teclado. Todo lo demás era enfocable, por qué los teléfonos no. Entenderlo sin depender de terceros me empujó a aprender a corregir estos problemas yo misma.
Para quienes diseñan, conocer la base del mundo del código ofrece más autonomía. Permite nombrar cosas con el lenguaje de desarrollo y señalar con claridad las desviaciones entre diseño y build. Por ejemplo, decir que un texto parece alineado a la derecha dentro de un contenedor centrado cuando debería quedar centrado, da a desarrollo una instrucción concreta y accionable. Eso reduce iteraciones, evita malentendidos y mejora la calidad final. Gana el equipo, gana el producto y ganan las personas usuarias.
En Q2BSTUDIO vivimos esa intersección a diario. Somos una empresa de desarrollo de software que crea aplicaciones a medida y software a medida con foco en accesibilidad desde el diseño del sistema de componentes hasta su implementación. Integramos prácticas de ciberseguridad, pentesting, servicios cloud AWS y Azure, servicios inteligencia de negocio y power bi, además de soluciones de inteligencia artificial, ia para empresas y agentes IA que potencian productos digitales de forma medible. Si buscas un equipo que traduzca Figma a código accesible, escalable y seguro, aquí lo hacemos realidad con cultura de diseño y tecnología trabajando al unísono.
Si estás valorando dar el salto y aprender a programar como profesional de UX, empieza por conceptos de estructura semántica, estados de enfoque, lectura del DOM y atributos ARIA críticos como aria hidden, aria label y roles. Practica identificando problemas de focus visible y navegación por teclado, y acompáñalo con revisiones de contraste y orden lógico de tabulación. Verás cómo mejora tu comunicación con desarrollo y tu capacidad para anticipar riesgos antes de que lleguen a QA.
Cuando un equipo necesita ir un paso más allá, combinamos coaching técnico con entregables listos para producción. Diseñamos y desarrollamos componentes accesibles, automatizamos validaciones y conectamos la capa de datos con paneles accionables. Y si tu producto requiere una plataforma robusta y mantenible, podemos ayudarte con software a medida que respete tus requisitos de negocio y crecimiento.
Además, si estás explorando cómo llevar la inteligencia de datos y la automatización a tu experiencia de usuario, nuestro equipo puede incorporar modelos, asistentes contextuales y orquestación de flujos con inteligencia artificial, integrándose con tus pipelines actuales y con prácticas de seguridad desde el primer día. Un enfoque integral que combina accesibilidad, rendimiento, ciberseguridad y escalabilidad cloud para que el diseño que imaginas se convierta en un producto excelente.
Aprender a programar no sustituye tu sensibilidad de diseño, la amplifica. Te permite diagnosticar, priorizar y argumentar con datos y con lenguaje técnico, y eso, en equipos multidisciplinares, marca la diferencia.