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Rutina de 90 días que me hizo pensar como arquitecto

90 días para pensar como arquitecto: de la ejecución táctica a la estrategia del sistema

Publicado el 19/09/2025

Antes solía programar como si jugara Tetris: dejar una función aquí, apilar una característica allá y esperar que todo encajara sin romperse. Mi GitHub estaba lleno de proyectos que funcionaban pero que no podían explicar por qué. Las revisiones de código eran batallas defensivas donde justificaba decisiones tomadas en piloto automático. Todo cambió cuando me obligué durante 90 días a pensar antes de teclear.

La llamada de atención llegó en una entrevista de diseño de sistemas. Me pidieron que diseñara un acortador de URLs. Podía construir la función, pero al explicar elecciones de base de datos, caché y escalado me quedé en blanco. No había proceso que mostrar, solo intuición y copia de patrones. Ahí entendí la diferencia entre ejecutar tácticamente y pensar estratégicamente: los ingenieros senior no solo resuelven problemas, anticipan problemas que aún no existen.

Diseñé una rutina basada en un principio central: antes de escribir código, pensar el sistema que lo albergará. Durante 90 días seguí este patrón diario de una hora dividida en fases claras para convertir la reflexión arquitectónica en hábito.

Fase 1 Problema y contexto 10 minutos Escribir qué se quiere construir y por qué desde una perspectiva del sistema. No historias de usuario sino preguntas del sistema: flujos de datos, modos de fallo, supuestos sobre escala, consistencia y rendimiento.

Fase 2 Arquitectura primero 20 minutos Dibujar el sistema en papel o en un mapa mental: modelos de datos, límites de API, interacciones entre servicios. Sin código ni frameworks solo cajas, flechas y preguntas sobre cómo circula la información.

Fase 3 Implementación con justificación 30 minutos Empezar a codificar después de definir la arquitectura. Cada decisión significativa debe acompañarse de una justificación escrita: por qué se eligió esa base de datos, cómo maneja casos límite, qué tradeoffs introduce.

Fase 4 Revisión y refactor 10 minutos Al terminar evaluar qué fallaría primero si la carga creciera 10 veces, qué supuestos podrían romperse y qué cambiaría un ingeniero senior. Una hora total cada día sin excusas.

La primera semana fue dura. La mente quería saltar a la implementación para obtener la recompensa de las funciones que funcionan. Forzar la pausa era incómodo, pero en la tercera semana todo empezó a encajar. Empecé a ver patrones que antes pasaban desapercibidos: puntos únicos de fallo en flujos de autenticación, cómo ciertas optimizaciones crean nuevos problemas y por qué microservicios pueden simplificar o complicar según el contexto.

También cambiaron las preguntas que me hacía. En vez de Cómo implemento esto ahora preguntaba Qué supone esto sobre el sistema; en lugar de Cuál es la manera más rápida buscaba Cuál es la forma más sostenible. El código resultante no siempre era más elegante aislado, pero encajaba mejor en sistemas grandes, anticipaba fallos, toleraba errores y se podía extender sin reescribir todo.

Para acelerar el aprendizaje incorporé herramientas de IA como aliado para poner a prueba decisiones arquitectónicas no para generar código sino para desafiar supuestos. Usé asistentes para jugar al abogado del diablo con mis diseños y para mapear transiciones de estado complejas. Las herramientas no reemplazaron el pensamiento arquitectónico sino que lo amplificaron, haciendo visibles dependencias y escenarios que antes no consideraba.

Hubo momentos claves de avance. Al desarrollar un chat entendí que el diseño inicial de la base de datos no escalaría, así que reorganicé el esquema por particiones temporales. En un flujo de pago detecté decenas de posibles fallos y añadí desde el principio circuit breakers y lógica de reintento. Y al implementar notificaciones en tiempo real pensé en múltiples dispositivos, escenarios offline y garantías de entrega, transformando una tarea aparentemente simple en un diseño completo y robusto.

La rutina enseñó que pensar como arquitecto no es acumular patrones sino construir un enfoque sistemático de resolución de problemas que evalúa dimensiones y tradeoffs. Cada decisión técnica es una elección consciente entre diferentes complejidades, modos de fallo y cargas de mantenimiento. Se desarrolla la imaginación del fallo y se diseña para el cambio: qué requisitos pueden variar, cómo puede evolucionar la escala y qué nuevas funcionalidades podrían necesitarse.

Tres meses después podía participar en discusiones de arquitectura sin recitar patrones memorizados. Mis revisiones de código dejaron de ser defensivas y se convirtieron en conversaciones sobre tradeoffs. Las estimaciones mejoraron porque anticipaba complejidad antes de implementarla. Empecé a contribuir a decisiones arquitectónicas en lugar de solo ejecutarlas, detectando problemas antes de que llegaran a producción y proponiendo alternativas no consideradas por el equipo.

Tras 90 días la práctica se volvió natural. Los bloques de tiempo se integraron en un proceso fluido de conciencia arquitectónica. La regla fundamental siguió siendo la misma pensar antes de construir, diseñar antes de implementar y anticipar antes de optimizar. Hoy al abordar un reto técnico pregunto automáticamente por flujos de datos, modos de fallo, supuestos y evolución futura. Esas preguntas no ralentizan el desarrollo, lo aceleran.

En Q2BSTUDIO aplicamos esa misma mentalidad en cada proyecto de aplicaciones a medida y software a medida. Nuestro equipo no solo programa funciones; diseña soluciones que escalan y evolucionan. Ofrecemos servicios integrales que combinan desarrollo de aplicaciones con inteligencia artificial y seguridad: desde proyectos de software a medida hasta soluciones de inteligencia artificial para empresas, agentes IA y automatizaciones que generan valor real.

Además integramos mejores prácticas de ciberseguridad y pentesting para proteger sistemas en producción, aprovechamos servicios cloud aws y azure para desplegar infraestructuras resilientes y utilizamos herramientas de inteligencia de negocio y power bi para transformar datos en decisiones. Nuestra propuesta abarca desde la idea hasta la operación incluyendo arquitectura, desarrollo, seguridad y monitoreo continuo.

Si quieres empezar a pensar como arquitecto dedica una hora al día a esta rutina y obliga a tu equipo a reflexionar antes de construir. Si buscas un socio que aplique este enfoque en proyectos reales, en Q2BSTUDIO diseñamos y desarrollamos soluciones completas que combinan aplicaciones a medida, servicios cloud, ciberseguridad, agentes IA y business intelligence para que tu producto no solo funcione sino que perdure y escale.

Empieza hoy a cambiar la forma de abordar problemas técnicos piensa en el sistema no solo en la función y transforma experiencia en sabiduría aplicada.

Fin del artículo, inicio de la diversión
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